Capítulo 9 – Deseo Insatisfecho
Continué cogiéndome a Amelia en el patio trasero de la escuela hasta que se puso el sol.
No puedo recordar cuantas veces lo hicimos, ni cuantas veces me vine dentro de ella.
Solo sé que cuando terminamos, una gran cantidad de semen se escurrió de su lugar intimo después de deshacer mi hechizo.
Aun así, sin importar cuanto la haya ayudado, mi hechizo de control corporal seguía siendo demasiado para la virgen Amelia.
Pero gracias a eso fui capaz de grabar en su cuerpo el sabor del placer carnal.
A pesar de haberse venido un par de veces, al principio Amelia seguía estando renuente, pero conforme el número de veces que lo hicimos aumentaba, su rostro se tiñó cada vez más con lujuria.
Al final, ella incluso tomó la iniciativa y me pidió que me la cogiera más duro.
Cuando finalmente acabamos, y antes de llevarla a su habitación a dormir, usé un contrato mágico para evitar que contara lo que hicimos.
Afortunadamente en ese momento el deseo por el cuerpo de un hombre había despertado en su interior, así que pese a no estar muy feliz, ella accedió a mi propuesta.
Ha pasado una semana desde entonces. Durante este tiempo usé la red de información de Annica para vigilar a Amelia.
Pero esta vez será distinto, ya que justo ahora me encuentro en mi propia habitación y no en la usual oficina de la directora.
La razón de eso es que hoy es un día libre y se vería sospechoso que permaneciera en la escuela.
Me senté en la silla junto a mi cama y activé un hechizo.
Era un hechizo de ‘Visión’ que le permitía al usuario ver a grandes distancias.
Normalmente solo se pueden ver las cosas que se encuentran a lo lejos, pero no a través de obstáculos, sin embargo, con mi dominio de la magia puedo ver lo que sea que este dentro de mi rango de alcance, sin importar lo que este en mi camino.
Cuando trabajaba como hechicero de la corte, inventé este hechizo con la ayuda de los miembros de la agencia de inteligencia. Es por eso por lo que puedo garantizar su efectividad.
De hecho, incluso puedo usarlo para espiar dentro de los dormitorios de las estudiantes, a pesar de estar protegidos con varias barreras mágicas.
“Pues bien, ¿Qué estará haciendo Amelia? ……”
Mientras exploraba el dormitorio de las estudiantes de primer año con mi ‘visión especial’, encontré un letrero con el nombre de Amelia Burness sobre una de las puertas.
La puerta parecía estar cerrada, pero eso no podría detener a mi hechizo.
Mi hechizo pasó a través de la puerta y miré el interior.
Y ahí estaba desarrollándose la escena que quería ver.
“Haa, haaaa…… ¿Por qué? …… ¿Por qué no puedo venirme?”
Amelia estaba acostada sobre la cama, masturbándose.
“Kukuku, bueno esto si es inesperado. No puedo creer que haya perdido tanto el control después de solo un encuentro……”
No pude evitar reír al confirmar que las cosas estaban yendo mejor de lo que esperaba.
Amelia se encontraba con su mano dentro de su falda, moviéndola sin parar.
Cuando acerqué mi hechizo de visión para tener una mejor vista, vi que estaba estimulando su lugar secreto sobre sus pantis.
Sus pantis estaban empapadas con sus jugos de amor, lo cual indicaba que su sesión de masturbación ya llevaba un buen rato.
[A pesar de que lo estoy haciendo igual que él…… ¡hnaaa!]
Amelia frotó su lugar privado rápidamente y un dulce gemido salió de sus labios.
Ella se apresuró a usar una almohada que estaba cerca para cubrir su cara y evitar que se escapara su voz.
[¡Hnn, hnmmm, mufuu, fuguuuuuu!]
Ante la vista de Amelia tocándose en secreto, no pude evitar que se formara una sonrisa en mi rostro.
Parece que nuestra estudiante finalmente encontró algo que disfruta hacer además de la magia.
Miré alrededor de la habitación y noté un escritorio desalineado en la esquina. Me dio curiosidad, así que moví mi hechizo para echarle un vistazo.
Sobre el escritorio había un grimorio y una libreta abierta, supongo que ella estaba en medio de sus estudios antes de comenzar a tocarse.
Sin embargo, sus notas estaban algo desalineadas, así que probablemente se puso cachonda y comenzó a masturbarse mientras estudiada.
No puedo creer que este tipo de deseos afectara a Amelia, una lunática obsesionada con la magia, hasta el punto de interrumpir sus estudios de los que se enorgullece tanto, parece ser que su inclinación hacia el placer sexual es más grande de lo que pensé.
Volteé a ver de nuevo a la persona en cuestión y presencié una escena mejor de la de hace rato.
Las mejillas de Amelia se encontraban sonrojadas, su respiración era pesada y parecía que se vendría en cualquier momento.
No obstante, incluso después de unos minutos, Amelia no mostro signos de venirse.
Gradualmente, sus dedos disminuyeron su velocidad y ella finalmente cayó en la cama.
[Ahhnn, hiuu…… ¿Por qué? ¿Por qué no puedo venirme?]
Amelia no pudo venirse a pesar de que sus jugos de amor se estaban desbordando de sus pantis, haciendo que la prenda de ropa se volviera inservible.
El culpable de todo esto fue, yo, obviamente.
Justo antes de dejar que se fuera, lancé otro hechizo sobre ella.
Fue una variación de mi hechizo de manipulación corporal que manipulaba los sentidos de la otra persona.
Solo que, en este caso, el hechizo limita los sentidos y entumece una parte específica del objetivo.
Originalmente era un hechizo usado por doctores para tratar heridas y realizar cirugías y trasplantes, así que, a diferencia del hechizo de manipulación corporal, que se usa para mejorar las habilidades locomotoras, podría decirse que es más un hechizo anestésico.
Pero pese a que el hechizo no es muy poderoso, sería un desastre si entumeciera los órganos vitales por error, por eso solo lo use en las zonas erógenas alrededor de la vagina de Amelia.
Ya que sintió mucho dolor al momento de perder su virginidad, pensé en aplicarle ese hechizo para asegurarme de no afectar su vida cotidiana.
Después de todo, una mujer caminando como un ciervo recién nacido en definitiva llamaría la atención, sin importar que tipo de excusa usase.
Es solo que subestime cuan pervertida era esta chica. Debido a mi hechizo, Amelia se volvió incapaz de tener un orgasmo sin importar cuanto se tocará a sí misma. Para ser honesto, no imaginé que se masturbaría tan pronto.
“Hmmm. ¿Debería decirle sobre mi hechizo?”
Tomé la libreta junto a mí y le escribí un mensaje a Amelia.
Cuando lancé un hechizo sobre él, este comenzó a doblarse hasta tomar la forma de un ave.
“Ahora ve con Amelia”
Lo aventé por la ventana y el ave de papel aleteó sus alas y voló hacia los dormitorios de las estudiantes.
Un par de minutos después, mi mensaje llegó a la habitación de Amelia.
“¿Pero que- …… ¿Es un mensaje?”
Mientras se limpiaba desconcertada, Amelia atrapó el ave de papel que entró por su ventana.
Después de leer su contenido, ella se sonrojó instantáneamente.
[Pervertido, no puedo creer que espíes la habitación de una chica…… ¡está bien, iré!]
Supongo que se dio cuenta de la presencia de mi hechizo porque miró directamente a mi proyección con una expresión molesta en su rostro.
Parece que su actitud rebelde no ha desaparecido del todo.
Bueno, era de esperarse. Después de todo, hace una semana destruí la confianza ciega que tenía sobre su talento mágico.
Mientras pensaba en esto, Amelia salió de su dormitorio y estaba por llegar a mi cuarto.
El hecho de que haya corrido todo el camino hasta aquí indicaba que estaba harta de su situación actual.
Pero en el fondo, ella probablemente piensa que solo yo puedo darle un orgasmo.
Y no necesité de mi hechizo lector de mentes para darme cuenta.
“¡Sir Krause, sé que está ahí!”
Poco tiempo después, la puerta de mi habitación fue abierta violentamente y apareció Amelia jadeando.
Su hermoso cabello plateado estaba desalineado por correr.
“Llegaste. ¿Quieres algo de beber?”
“No gracias…… ¡Sabia que todo era tu culpa! ¡Le hiciste algo raro a mi cuerpo!”
“¿A qué te refieres con algo extraño? Todo lo que hice fue aplicarte un hechizo anestésico para aliviar el dolor por perder tu virginidad. ¿Cómo iba a saber que mi hechizo tendría tal efecto secundario en ti? Fue tu lujuria quien empeoro tu condición, no yo”
“Tú……maldito…… ¡¿Cómo pude haber creído en tus mentiras?! ¡Si pudiera usar mi magia contra ti, ya te habría vuelto carbón!”
Debido al contrato mágico que firmamos, ahora somos incapaces de infligir daño el uno al otro. Eso significaba que Amelia ya no es capaz de dañarme directamente y, de igual manera, yo tampoco a ella.
“¿Oh? ¿En serio? Incluso sin nuestro contrato, tú no pudiste hacerlo. Además, deberías estar agradecida de que no te carbonicé con mi contrataque esa vez”
Cuando dije eso, Amelia no pudo hacer más que morder sus labios.
Así de grande era la diferencia en nuestras habilidades.
“Eso dicho, la forma en la que sigues intentando pelear contra un enemigo insuperable es admirable. Normalmente, nadie sería capaz de pensar en siquiera apuntar un hechizo contra un oponente al que saben que no podrán vencer, más aún en el caso de una estudiante de primer año como Amelia sin entrenamiento militar”
“Sé que no tengo oportunidad contra ti ahora, pero en unos años, estoy segura de que me convertiré en una hechicera más poderosa que tú”
“Kukuku, cuanta confianza, Miss Burness”
Incluso cuando fui llamado el hechicero mas joven en entrar a la ‘Corte’, jamás me sentí tan orgulloso de mi mismo.
Sin embargo, es cierto que Amelia tiene mucho potencial.
Pero yo tampoco soy tan tonto como para no darme cuenta de que ella llegará a ser un peligro.
Es por eso por lo que cambié el tema hacia lo que quería discutir hoy con ella.
“Bueno, dejando eso de lado, ahora que estás aquí hablemos sobre tu problema”
Mientras decía esto, apunté hacia su parte baja del cuerpo.
La mirada de Amelia se volvió furiosa al recordar que acababa de verla masturbarse.
“¡Lo sabía! ¡Fuiste tú todo este tiempo! ¿Cómo lo hiciste? ¿Y que debo hacer para deshacer el hechizo? Te tomaste muchas molestias para traerme aquí, así que será mejor que me respondas”
Amelia se paró frente a mí y me miró como si estuviese interrogando a un criminal.
Estoy seguro de que está esforzándose para lucir intimidante, pero desde mi perspectiva, ella lucia muy linda.
Comparado con mi antiguo jefe, él era un dragón loco y ella una delicada avecilla.
“Bueno, supongo que es hora de explicarte”
Dije y procedí a explicarle a Amelia la razón por la cual no podía venirse.
Cuando terminé, una mezcla de enojo y frustración apareció en su rostro.
“¡¿Qué demonios estas haciendo con magia medicinal avanzada?!”
“Nada. De hecho, la usé apropiadamente, eres tú quien tiene una libido que siguió creciendo hasta el punto en que ya no pudiste controlarlo”
Es cierto que la magia medicinal puede ser modificada para propósitos eróticos, y yo la he estado usando como base para varios de mis hechizos desde que me volví un hechicero de la corte, pero es enteramente culpa tuya el que te hayas puesto tan cachonda.
Eso dicho, comparado con una enfermera promedio de la academia, puedo decir con confianza que soy igual o incluso mejor a ellas en términos de habilidades.
“……Entonces, ahora que te expliqué todo. ¿Ya puedes liberarte por ti misma?”
“¡Si aprender magia medicinal fuera algo tan fácil, no habría tenido problemas en primer lugar!”
“Supongo que tienes razón”
Incluso si tienes talento, si empiezas desde cero te tomará algo de tiempo.
El problema es que la libido de Amelia estaba volviéndose más fuerte cada día.
Si no lo resuelve, terminará afectando su vida diaria.
Siendo ese el caso, a ella solo le queda una salida – y eso es pedirme ‘directamente’ que elimine sus deseos sexuales.
Para cuando llegue a esa conclusión, Amelia ya se había puesto de rodillas frente a mí.
“……conmigo”
“¿Qué dijiste? No pude escucharte. Por favor dilo más fuerte”
“Kuh……Por favor…… ¡por favor ten sexo conmigo y haz que me venga! ¡Ya no puedo soportarlo!”
Es así como la arrogante Amelia finalmente se doblegó ante mí.
Notas del Traductor
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